Confesiones De Un Ex Mujeriego
- The Gentlemen
- 3 sept 2016
- 17 Min. de lectura
Hoy les escribo mi confesión más grande, no importa que no sepas mi nombre, no importa que no me conozcas, no importa que nunca me hayas visto, lo único que importa es que es momento de romper el silencio y confesar que existe detrás de un mujeriego. Al día de hoy me considero un exmujeriego, si tu primer pensamiento es; “eres igual que todos” “por eso me dan asco los hombres” “por eso no puedo encontrar a alguno que valga la pena”, “¿Cómo es posible que escribas estas cosas y resultaste siendo un mujeriego?” déjame decirte que no deberías de pensar eso, te pido que no juzgues hasta leer lo que está detrás, de hecho, salir con un exmujeriego es lo mejor que le puede pasar a alguien, pero eso lo dejaremos para el siguiente post. La manera en que voy a escribir va a ser totalmente cruda y real, puede parecer hasta cierto punto cínico, pero en verdad no lo escribo por ti, lo escribo por mí, porque ahora puedo ser así.

Todos en algún punto de nuestra vida hemos visto películas, revistas, videos, programas, artículos en internet, libros y cantidad de cosas más dedicadas al juego de la seducción y de la atracción. Muchas personas han llevado esto al límite para tratar de conquistar al amor de su vida, algunos quizás solo porque querían tener más sexo. Hombres y mujeres somos culpables de esto, culpables de que hoy exista todo este material, el problema es el mismo, no sabemos ligar y no nos conocemos lo suficiente para poder ser “nosotros mismos”.
La gente es igual aquí o en Rusia, a la gente le gusta jugar juegos mentales para manipular a las demás personas, nos gusta manipular relaciones para que no se vayan de nuestras vidas, nos gusta fingir que estamos atraídos a personas cuando no lo estamos. Algunas personas están tan obsesionadas con tener una pareja que harían lo que fuera por conseguir una, otros como yo simplemente no teníamos éxito con ninguna mujer y decidimos tomar al toro por los cuernos y enfocarnos en trabajar en nosotros mismos, hoy voy a confesar como es la vida de un mujeriego y de eso se va a tratar todo, espero que lo leas hasta el final.
Mi historia comienza como la de cualquier otro mujeriego, tenía pocos amigos, no era la persona más popular de la clase, me hacían algo de bullying de vez en cuando, las mujeres se aprovechaban de ser el inteligente de la clase, no estaba ni cerca de estar a la moda, no sabía cómo acercarme a ninguna mujer y hasta esa edad las únicas personas que me habían dicho que estaba guapo o que era súper adorable eran mi mama, mis tías y mis abuelas. A esto le podemos sumar que yo siempre fui más bien una persona solitaria, nunca fui introvertido y siempre he tenido mi autoestima y mis ambiciones muy altas, solo que nos mudábamos seguido de ciudad en ciudad, por lo cual mis relaciones nunca eran muy estables. Ahora, no quiero que sientas lastima por mí, créeme que crecí en el mejor ambiente familiar que un niño pudo pedir, hasta la fecha no me arrepiento de nada, de hecho, eso es parte de lo que me formo y me ayudo a tener una autoestima bastante elevada, a diferencia de muchos otros. No escribo para que me tengas lastima, si no para que comprendas de dónde vengo a grandes rasgos y en un resumen muy corto.
Cuando entré a la pubertad no era el tipo guapo del que todo mundo se enamora, no era el deportista, no era el chico popular, solo era más astuto que los demás y en esos tiempos empecé a leer cosas de psicología y aprendiendo algunos trucos para manipular personas, estos trucos los usaba más para negociar con mis maestros que para ligar. Un buen día en una de las primeras fiestas que fui yo solo, tendría 14 años en ese entonces, conocí a los que serían mis amigos inseparables y muchos de ellos para toda la vida. Al menos ya tenía amigos, solo que aún no sabía cómo acercarme a las mujeres.
Pasado un tiempo, tenía golpes de suerte con alguna u otra mujer, al menos ya estaba teniendo acercamientos con ellas, ya estaba teniendo el valor de hablarles y acercarme sin temor a ser rechazado. Seguí leyendo más cosas de psicología, más cosas de como ligar, más cosas para manipular a las personas, en realidad no tienen idea de que este tema se ha vuelto casi casi en una rama de la ciencia y la psicología moderna. Yo soy el mayor de mi familia, mi papa siempre fue muy bueno conmigo, en algunos momentos me llego a dar consejos para seducir mujeres, quizás lo debí de haber escuchado más en aquel entonces para tener más éxito. A pesar de todo lo que leía, sentía que no tenía el éxito que quería con las mujeres, todo lo que conseguía, se sentía más como un golpe de suerte, que por lo que había aprendido, además mi primera novia negaba que habíamos andado. Así que tome el único camino que me quedaba, esconder mi dolor y convertirme en un mujeriego.
En un principio me di cuenta de lo sencillo que en verdad es hablar con las mujeres y seducirlas teniendo la actitud correcta y teniendo un plan de ataque. Muchos hombres tienen un ego gigantesco y a lo que más miedo le tienen es al rechazo, así que prefieren tomar algo de alcohol, ponerse borrachos y ahora si acercarse a las mujeres, lo que hace que cuando se acerquen con ella y sean “el siguiente tipo borracho que trato de seducirla” pues, te queda el trabajo más fácil para ti que estas sobrio y en todos tus sentidos. Esa es la razón por la cual tomo muy poco o no tomo cuando voy a bares o antros, quiero estar en mis 5 sentidos todo el tiempo. La mayoría de los hombres no saben cómo entablar una conversación con las mujeres y cuando tienen una por lo regular acaban diciendo algo bastante extraño o tienen conversaciones vacías en donde solo las están tratando de impresionar. El 97% de los hombres en verdad no tienen ni la menor idea cómo funciona el juego y no tienen intención de mejorar.
A través de los años me hice bastante bueno en este campo (no quiero parecer arrogante ni nada) empezó el éxito, ahora si las mujeres que me ligaba no eran solo un golpe de suerte, era por mis métodos, porque yo había aprendido a darme mayor valor. Al mismo tiempo empecé a compartir estos conocimientos con mis amigos, incluso cobré por enseñar a ligar a otros compañeros míos de clases, alguno de ellos se va a casar en unos meses más con su “crush” de preparatoria gracias a estos consejos, así que, si crees que no sirve, si sirven. Mis amigos y yo decidimos entrenarnos y empezar a tener más éxito con las mujeres, todos estuvimos estudiando estas artes, dedicamos tardes a ver vídeos, a repasar libros, a replantear ideas, preparar tácticas, crear historias que nos dieran valor, inventamos nuestro propio juego y nuestras puntuaciones, una vez elaborado, salimos a jugarlo y a demostrarnos que podemos ser mucho más exitosos con las mujeres. En verdad esto nos hizo ser mucho más unidos de lo que muchos amigos llegan a ser en sus vidas. Nos dimos cuenta que esta información, siempre y cuando la utilizáramos de la manera correcta nos iba a dar las herramientas necesarias para estar con la persona que queremos. Pero claro está que con toda la información poderosa siempre tiene un lado obscuro y es de lo que vamos a hablar, te voy a revelar el lado obscuro de ser un mujeriego, el lado que tú no conoces cuando estas con alguien que estudio bastante sobre la seducción y la manipulación.
Unos años atrás me di cuenta que mi razón de ser mujeriego no era para impresionar mujeres, no era para enamorar mujeres, no era para acostarme con ellas, todo esto se trataba de mí, se trataba de impresionarme a mí mismo, de llevarme al límite y ganar el “juego”. Esto hacia que cada mujer que cruzara por mi camino en el día a día, podría ser mi siguiente objetivo, solo veía a mi siguiente presa en ella, no veía a una persona, solo veía mi ambición de seguir mejorando y ligando, si lo quieres ver de la peor manera, si solo veía un pedazo de carne con tacones. Ahora puedes pensar que es impresionante que un hombre se atreva a admitir esto, no tengo problema con admitirlo, ya que todos hemos pasado por etapas obscuras en nuestras vidas, no soy un misógino y no soy machista, de hecho, soy de las personas que más tratan de empoderar a las mujeres a que ellas también aprendan a ligar para que no caigan en mujeriegos como yo y que sigan sus metas sin la necesidad de un hombre a su lado. Espero que aún no me hayas empezado a juzgar, acaba de leer todo antes de pensar las peores cosas de mi.
Admito que muchas veces solo hablaba con mujeres solo para “entrenarme” o “entretenerme” de alguna manera, era como un “calentamiento previo al juego” era mi entrenamiento para lograr dominar el arte de la seducción, quizás solo conseguía su teléfono, la verdad es que nunca le iba a marcar, solo estaba cazando por cazar. El problema es cuando no te das cuenta que la otra persona si está esperando que le marques, la otra persona está creyendo en ti, la otra persona está confiando en que eres quizás un poco diferente, mientras tanto mi único interés en ella era mantener mis habilidades. Con muchas otras mujeres solo jugué con ellas, al menos no soy de los que aparecen un día y al día siguiente desaparecen, todo llevaba un proceso gradual, todo estaba perfectamente medido y probado. Voy a cortar mi texto para dar un tip extra; lo más estúpido que puedes hacer en tu vida, es mandar a volar a una mujer que esta atraída a ti de un día para otro, quizás te besaste o lo llevaron más allá, pero no entiendo ¿Por qué te quieres deshacer de una mujer que ya la tienes ahí?, hiciste lo más difícil del proceso. Aunque yo después me haya dado cuenta que yo estaba haciendo algo mucho peor, estaba enamorando mujeres que yo sabía no íbamos a llegar a nada, solo quería pasarla bien. Y ese es el problema, no tienes por qué enamorar a las personas, muchas mujeres están perfectamente abiertas a mantener un "Free" o una relación abierta, siempre y cuando lo pongas en la mesa desde antes, no tienes que jugar con sus sentimientos si no quieres nada y ya estás pensando como mandarla a volar.
Llego un punto en el que estaba dejando que más mujeres se quedaran en mi vida, cuando la verdad es que no me importaban para nada. ¿Suena a que soy una persona horrible? Quizás si lo fui, pero me llegó el momento en que me di cuenta que estaba en un círculo vicioso, estaba corriendo por el mundo como un adicto a conquistar mujeres, no me importaba nada más, simplemente veía a una mujer y como bien decían mis amigos “ya respiro tu aire” a lo cual se referían en tono de broma a que solo con eso ya debía de estar enamorada de mí. ¿Qué si me siento orgulloso de esto? En su momento si, en su época si me sentía orgulloso de ser reconocido por estas cualidades, ahora simplemente lo recuerdo con una sonrisa y un buen momento de mi vida, no me arrepiento de nada, esto es lo que me ha formado a ser la persona que soy hoy mismo, la persona que has estado leyendo, la persona que te está enseñando a ser mejor.
Mi despertar llegó algo lento si lo quieres ver así, vino después de que corte con la ex novia que más tiempo dure, una relación de casi dos años con la cual pensé que me iba a casar, ella pudo romper con mi racha y atraparme, me mantuvo fiel y sin buscar otra mujer con quien buscar todo lo que ella me daba. Pero una vez que terminamos, el lado obscuro que llevaba dentro se volvió a asomar en mí, me dedique de nuevo a hacer lo que mejor sabía hacer, hasta que llegó un momento en que tenía más mujeres que días de la semana, era casi imposible dedicarles tiempo a todas ellas, era imposible ir a algunos lugares, era imposible mantener el entusiasmo de verla cada día, porque en verdad estaba agotado. Algunos hombres solo van a poder soñar con esto o piensan que es imposible, piensan que esto no puede pasar, solo un pequeño porcentaje de hombres saben cómo funciona el juego. Mis amigos al igual que yo, todos aprendieron estas lecciones, todos tuvieron múltiples opciones en su vida, pero entre todos estábamos teniendo números increíbles en cuanto a mujeres nos ligábamos y nos llevábamos a tener fiestas privadas.
Un día lo recuerdo perfectamente, me vi al espejo, vi el reflejo de la persona en la que me había convertido, me di cuenta que todos los mujeriegos vivimos una vida llena de círculos viciosos, vivimos una vida sin sentido, vivimos una vida de manipulación, me puse a pensar en todas esas mujeres a las que les he hecho daño, pero me di cuenta que me hice más daño a mí mismo, el juego me salió al revés y mi estilo de vida me estaba absorbiendo.
No lo niego, ser mujeriego tiene sus buenas cosas, te hace ser una persona muy ambiciosa, siempre vas a querer más, te hace ser una persona muy poco conformista, siempre vas a querer superarte a ti mismo, te hace una persona competitiva, te hace luchar por tus sueños y esto es verdad, en este momento he logrado muchas más cosas que muchas personas con el doble de mi edad. Pero lo que no te das cuenta es el tiempo que le has invertido, el dinero, la energía que requiere mantener a una vida así, si una mujer es algo absorbente, ahora imagina salir con varias mujeres al mismo tiempo y tener que invertir tiempo en cada una de ellas, recordar cada tema que hablaste, llevarlas a buenos lugares, pagar cada cuenta, estar al tanto de la vida de cada una, invertir tiempo para enviarle mensajes a cada una, en verdad no tienes idea de lo desgastante que puede ser. Era momento de replantear todo antes de que el barco se hundiera o más bien que yo perdiera la poca cordura que me quedaba.
Ni mi sonrisa, ni mi carisma eran capaces de esconder los vacíos que tenía en mi interior, se podía ver perfectamente a través de mis ojos lo vacío que estaba, no importaba lo bien educado, lo que sabía del mundo, todo lo que había aprendido, cualquier mujer podía darse cuenta que era un mujeriego, podían sentir que algo iba a salir mal de todo esto, pero irónicamente solo hacía que esto fuera más atractivo. Ellas sabían que era el lobo disfrazado de oveja, un caballero en el trato que les daba, un romántico empedernido, un hombre con estilo, con inteligencia y ambiciones muy altas, con una mente astuta, con un guiño en el ojo que con el tiempo se me hizo tic para demostrar cuando algo me gusta o me atrae involuntariamente, con comentarios ingeniosos, con platicas profundas de temas que no se hablan seguido, saber acariciar los puntos ideales para poner a cualquier mujer con la piel de gallina. Pero (claro que siempre existe un pero) todo esto me hizo darme cuenta que no estaba siendo el caballero que decía ser o que profesaba, más bien era un niño probando que tan hombre era conquistando a la mujer que se me pusiera enfrente. Estaba comportándome como si fuera un Emperador Romano queriendo expandir mi imperio alrededor del mundo, fue en este momento en que me di cuenta que era hora de hacer varios cambios dentro de mí antes de que acabara de quebrarme por dentro.
Ser un hombre no se trata de los números de ligues que has tenido, no se trata de cuantos contactos tienes en tu celular, no se trata de cuantas personas estas mensajeando al mismo tiempo, no se trata de ligarte a esa mujer que parece inalcanzable solo para demostrar que sabes lo que estás haciendo, tampoco se trata de cuánto dinero estás haciendo, ni que carro tienes, mucho menos de que marca es la camisa que traes puesta o que tan grande es el departamento donde vives, estaba totalmente equivocado, estaba midiendo mi éxito en cosas materiales y superficiales.
En este punto de mi vida era igual a un adicto a las drogas, solo que, en lugar de drogarme, mi droga era seducir mujeres. Necesitaba sentir estar cerca de una mujer, necesitaba saber que alguien quería estar conmigo, que alguien me estaba extrañando, que para alguien yo era su todo. No estaba siendo la persona que quería ser, solo estaba creando muchas cosas negativas a mi alrededor, ganándome enemigas, haciendo que hablaran mal de mí a mis espaldas. En esos momentos de mi vida fue la única vez que estuve avergonzado de mi habilidad de seducir. No se trataba del sexo, nunca fue eso, todo se trataba de mí y mi ego, de demostrar quién era el más chingón de todos y el más cabrón de todos. Genuinamente me interesaba por ellas, aunque resulte difícil de creer, en verdad me preocupaba por ellas, claro que quería saber cómo había sido su día, quería saber que tal les había ido en clases o en el trabajo, quería saber si habían llegado bien a casa, quería saber si no tenían problemas en su casa, ayudaba a sus amigas a entender a los hombres, en fin parecía ser el partido perfecto y dentro de mi si quería hacer esa conexión, pero mi vicio era más fuerte que esto, ya estaba tan anclado en mí que era difícil dejar de ligar.
Otra cosa que te darás cuenta cuando eres un mujeriego, es que tus amigos resultan ser igual que tú, algunos van a ser mucho mejores que tú, otros serán peores, pero se va a crear una hermandad en donde todos se apoyan a todos, eso es lo que tengo hoy con ellos, es una verdadera hermandad, a todos los veo como mi familia. El problema es que cuando todo tu grupo de amigos se pone como meta seducir mujeres y todos se ponen a aprender a hacerlo correctamente, las posibilidades son infinitas, ahora tienes al menos 10 mujeriegos trabajando todos juntos como una organización criminal para llevar mujeres a una casa.
Si piensas que alguna vez le faltamos o le falte el respeto a una mujer, permíteme decirte que no, podría asegurar que, si le preguntas a cualquier mujer que salió conmigo, no tienen nada malo que decir con respecto del trato que recibieron, de las atenciones que tuve, de las largas platicas que hubieron, de las cenas lujosas, de los largos paseos en carro, de las escapadas románticas, de la conexión que se creó, de la atracción que había. Esto es parte de ser un mujeriego, aprender a tratar a las personas como quieren ser tratadas, aprendes a leer a cada persona y detectar sus necesidades, esta es la manera más rápida de llegar a ellas, aprendes a explotar sus deseos a tu favor, aprendes a ver a las personas de una manera más profunda, aprendes a leer su lenguaje corporal y a seguir sus indicaciones, el único detalle que podrían tener es que simplemente me fui cuando todo parecía ir perfecto entre los dos, solo me desaparecí sin dejar alguna explicación lógica o racional del porque ya no podía seguir viéndola. ¿Quieres saber la verdad? La verdad es que me iba a enamorar si seguía ahí y yo simplemente no quería dejar de ser un mujeriego. Por eso es que nunca vas a poder cambiar a un mujeriego si él no quiere cambiar.
Cuando al fin pude romper con este círculo vicioso de ser un mujeriego, en realidad me hice mucho más solitario, me dedique a hacer otras cosas, me dedique a cuidar otros aspectos de mi vida que había descuidado, me empecé a preocupar más por mi futuro. Salir a la calle a conocer a otras mujeres ya no era prioridad, no era importante para nada, de hecho, deje de tener citas, deje de salir con mujeres, ya no contestaba mensajes de nadie. Pero de nuevo la ironía se apodero de mi vida e hizo que con esta decisión se acercaran más mujeres a mi vida, porque querían probar que tan cierto era eso que había dejado atrás mi vida de mujeriego.
Decidí poner las cosas sobre la mesa, era momento de ser real conmigo mismo, de ahora en delante tengo que tener una política de honestidad y transparencia con cada cita que tenga, puedes preguntarte ¿Por qué? La respuesta es sencilla, ya no quiero mujeres para perder el tiempo, si a una mujer no le gusta mi estilo de vida o quien fui en el pasado, ella puede irse en cualquier momento, la advertencia ya está en la mesa, ella ya sabe en que se mete, conoce mi pasado, sabe quién fui y que todo eso formo a la persona que ahora tiene frente a ella, sin todo eso jamás me hubiera convertido en lo que soy hoy. No quiero empezar una relación basada en mentiras o en ocultar cosas, quiero que la persona que este conmigo sepa perfectamente quien soy y no que vea una mentira más de la persona que soy, no quiero ocultar mi pasado porque eso sería igual a mentir o engañar. Tengo que establecer relaciones basadas en la honestidad, relaciones que puedan seguir creciendo con el tiempo hasta convertirse en conexiones con significado. No quiero romperle el corazón a nadie más, en mí no quedan sorpresas, no quedan sombras, no quedan cosas ocultas, quiero que vean quien soy y todo el equipaje que vengo cargando.
Las relaciones se tienen que basar en respeto por la otra persona, lealtad a la relación y mucha honestidad en la comunicación, se perfectamente lo que se necesita para tener una relación, no por nada era bueno haciendo lo que hacía. No por nada conseguí tantas citas, no por nada muchas personas me buscan para darles consejos, no por nada me hice de una reputación.
En este momento puede que estés pensando “¿Por qué demonios está exponiéndose de esta manera?” bueno en primer lugar porque no me avergüenza decir quien fui y quien soy, no tengo problema con admitirlo, es parte de mi vida y siempre lo será, ese fue el camino que decidí tomar muchos años atrás y posteriormente decidí reivindicarme y mejorar. En segundo lugar, solo un exmujeriego es capaz de expresar perfectamente lo que es ser un mujeriego, de ser capaz de escribir lo que se siente ser uno y poderlo transmitir a otras personas, ahorita soy tu única oportunidad para comprender como funciona un mujeriego.
No quiero que pienses que ahora soy un santo, no lo soy para nada, solo ya no me ando con juegos, ahora me encargo de construir relaciones que tengan sentido y conexiones intimas, relaciones que en verdad tengan cierta importancia, relaciones que no me hagan perder el tiempo. Me gusta perseguir mujeres, creo que eso siempre va a estar en mi sangre, pero ahora me enfoco en perseguir a una sola. Ya no voy a desperdiciar esfuerzos en una mujer que no valga la pena, ¿te suena arrogante? Bueno esto se llama confianza y darte valor, esa es la diferencia entre ser un niño y un hombre, ya no voy a desperdiciar mi tiempo jugando, porque ese juego nunca lo voy a ganar. Mientras la mayoría de los hombres andan por la vida tratando de tener sexo con lo que se mueva y si no se mueve lo patean, yo mientras tanto disfruto solo con verlos, disfruto poder ver si va a resultar el esfuerzo del otro, me he hecho muy analista de las acciones de las personas, he aprendido muchas cosas que jamás hubiera aprendido si no hubiera seguido este camino. Ahora disfruto ver cómo se comportan las demás personas en una cita y puedo percibir si va a funcionar o no lo que están haciendo para conquistarla.
Muchos hombres me han preguntado ¿Oye como le hago para atraer mujeres de calidad? La respuesta es sencilla, si tú estás jugando el juego e intentando conquistar a cuantas mujeres puedes conquistar en una noche, lo más probable es que ninguna, lo más probable es que te encuentres con mujeres desesperadas, mujeres no tan guapas, mujeres inestables, mujeres interesadas, mujeres que también están jugando y claro que las mujeres también juegan ¿Por qué las mujeres no van a estar jugando contigo su juego?, ellas tienen el mismo derecho de jugar si tú lo estás haciendo. Lo que si tengo que decir, es que en algún momento vas a desear dejar los juegos, para ser sinceros, ni siquiera es una buena inversión de tu tiempo, ni tu dinero.
Para mi ahorita mis perspectivas de lo que quiero han cambiado, ahorita no me importa quien seas, ni que tan atractiva puedas ser, si veo una alerta en ti, simplemente no quiero estar ahí. Si no tienes buena personalidad y sentido del humor, si no tienes planes a futuro y metas, si no tienes valores y educación, si no eres inteligente y no quieres alcanzar grandes sueños, si en tu casa no te dieron amor y ahora tienes un trauma por esto, no te quiero en mi vida, no quiero desgastarme en algo que no va a funcionar y que no quiero.
¿Quieres la clave para dejar de ser un mujeriego? Tienes que ser honesto contigo mismo, tienes que ser honesto con los que te rodean, tienes que dejar la adicción a conquistar mujeres como deporte, tienes que darte cuenta que ese círculo vicioso no te va a llevar a nada, tienes que lastimarte muchas veces para poder dejar de ser un mujeriego, tienes que gastar todas tus energías hasta quedar harto de todo esto. Tienes que hartarte del juego, tienes que llegar a tus limites, porque si aún no llegas a tus limites, no vas a dejar de ser un mujeriego, quizás seas un mujeriego en stand by.
Ninguna mujer va a poder cambiar a un mujeriego, (puedes leer ese post aqui) nunca lo vas a convencer de dejar esa vida, el mujeriego tiene que dejar esa vida por sí mismo, tiene que caer en el abismo y ver en el hoyo que esta, solo de esta manera el mismo podrá decidir si quiere salir de esta vida. Una vez que decida salir de ese agujero, créeme que tener a un exmujeriego como pareja es lo mejor que te puede pasar, nadie sabe tratar mejor a una mujer que un exmujeriego, nadie te va a tratar como la princesa que crees ser que un exmujeriego, los exmujeriegos valoran sus relaciones una vez que dejan esa vida atrás, porque no quieren cometer los mismos errores y van a poner mucho más del 100% del esfuerzo en que funcione.
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